Un informe de Uruguay XXI, el Instituto de Promoción de Inversiones, Exportaciones e Imagen País del Uruguay, invitando a medianas empresas argentinas a radicarse en la banda oriental genera luces de alarma en ámbitos oficiales argentinos
El informe consta de 17 escuetas páginas pero que están diseñadas con un contenido tal que es música para los oídos de empresarios argentinos muchas veces abandonados de toda consideración estatal y social.
El informe comienza con una pregunta directa: “¿Por qué instalarse en un parque industrial en Uruguay?”
Para responderla nos brinda seis respuestas contundentes entre las que figuran 16 años continuos de crecimiento; que es el país más equitativo y con mayores ingresos per cápita de América Latina; que el sector industrial uruguayo creció a una tasa promedio de 2,1% entre 2007 y 2017; su grado inversor; que durante la última década fue el segundo país receptor de Inversión Extranjera Directa (IED) en relación al PIB (5,3%) y que es el segundo país en utilidades reinvertidas sobre las utilidades totales (61%) de América Latina.
Cualquiera que lea los reclamos de los pequeños y medianos industriales argentinos encontrará que estas respuestas son irresistibles.
Beneficios para empresas
Posteriormente, detalla los beneficios que se otorgan a quien monte una industria es ese país, entre los que destaca la ley de Promoción de Inversiones que otorga exoneraciones y créditos fiscales; el proyecto de ley que concede exonerar un 15% adicional del IRAE respecto de un proyecto de inversión fuera del Parque Industrial. El IRAE es el impuesto a la renta de las empresas que grava sus utilidades y tiene una tasa única del 25%
También destaca el acceso a regímenes de promoción como zonas francas, puerto y aeropuerto libre, de depósitos aduaneros y de admisión temporaria, y que el inversor extranjero goza de los mismos incentivos que el local y que no hay restricciones para la transferencia de utilidades al exterior.
Además, indica que los proyectos de inversión promovidos por el Ejecutivo pueden exonerar del IRAE entre el 20% y el 100% del monto invertido, así como también se exonera del Impuesto al Patrimonio los bienes muebles del activo fijo y obras civiles y se recupera el IVA de las compras de materiales y servicios para estas últimas y exonera de tasas o tributos la importación de bienes muebles del activo fijo, declarados no competitivos de la industria nacional.
Finalmente, el documento explica cómo estas promociones varían según la zona elegida al detallar que se dividió al país en cuatro regiones: norte, este y centro, litoral oeste, sur, y área metropolitana de Montevideo a las que se les asignaron distintos incentivos, como ser beneficios fiscales diferenciados en el decreto que reglamenta la Ley.
En el caso de la exoneración del IRAE, se inicia con el 50% de la reinversión de utilidades. Este porcentaje aumenta según el área hasta el 75% zona norte, este y centro.
Otro incentivo es el plazo para materializar los beneficios fiscales de 3 a 6 ejercicios según la zona.
Además, los instaladores de los parques también gozan de otros beneficios tributarios según zonas. En el caso del IRAE, los plazos de amortización de las inversiones en el norte del país se extienden según la zona hasta 15 quince años y a estos beneficios se le suma la exoneración total de impuestos a las importaciones de maquinarías y equipos no competitivos de la industria nacional.
Asimismo, el IVA puede ser tomado como crédito fiscal por compra de materiales y servicios para la construcción de obras civiles, maquinarias y equipos.
El documento resalta que las empresas instaladas en los parques puede adoptar el régimen general de promoción de inversiones que prevé un 15% adicional en los beneficios generales del decreto a las empresas instaladas en agrupamientos industriales, y un crédito fiscal por los aportes patronales asociados a los puestos de trabajo incrementales por el proyecto promovido durante un período de cinco años.
Radiografía de los parques
El trabajo concluye con una foto de la actualidad uruguaya en la que cuenta que actualmente hay cuatro Parques en funcionamiento y otros cinco aprobados y en proceso de instalación. Además, hay otros nuevos proyectos en proceso de evaluación.
Los cuatro Parques instalados son:
- Plaza Industrial S.A Zona Este: Dispone de un predio de 18 hectáreas en lotes de 2.000 y 7.000 m2. Se invirtieron u$s 14,5 millones. Allí trabajan doce empresas de sectores agroalimentarios y químicos.
- Parque Industrial Juan Lacaze: De la Intendencia de Colonia. Allí están instaladas más de una docena de empresas, muchas del rubro textil.
- Parque Industrial Paysandú: Propiedad del municipio. Están instaladas media docena de empresas entre ellas algunas de tecnología para energía solar.
- Parque Tecnológico e Industrial del Cerro :Allí se encuentran más de 70 empresas, dedicadas principalmente a actividades medioambientales, de alimentación, textiles, metalúrgicas, producción en madera, en plástico y vidrio, así como productos eléctricos y otras actividades de producción, reparación y servicios.
En tanto que los que están en proceso de instalación son:
- Parque Agroindustrial Alto Uruguay: Propiedad de la Intendencia de Salto, es un parque industrial de servicios y logística, en las afueras de Suárez, en un predio de 150 hectáreas. Invirtieron u$s 3,1 millones.
- Parque Industrial de Pando: Tiene una extensión de 70 ha y tiene adjudicado más de la mitad del predio a empresas de distintos sectores. Surge como un proyecto urbanístico que contempla la posibilidad de que empresas de base tecnológica se instalen allí para trabajar en áreas de I+D.
- Parque Industrial Polo Logístico :Ruta 5 Parque logístico e industrial desarrollado y gestionado privado, con una superficie de 80 ha, en la zona metropolitana de Montevideo. El Proyecto contempla entre otros, destinar medio millón de m2 a la actividad logística, un área fiscal de 30.000 m2 y una zona con prioridad industrial de 60.000 m2.
- Parque Sur: Se trata de un Parque privado que tiene dos empresas ya instaladas de la cadena agroalimenticia.
- Parque Industrial de Melo: 110 ha y con dos empresas instaladas por ahora. Una curtiembre y un laboratorio de biotecnología.