El Ejecutivo provincial firmó junto a industriales y organizaciones gremiales un acta acuerdo en defensa de la industria y el trabajo digno. También anunció medidas para evitar despidos.
El gobernador de La Rioja, Sergio Casas, envió a la cámara de Diputados provincial un proyecto de ley que busca proteger el empleo industrial mediante la creación de un fondo compensador eléctrico que se hará cargo de pagar parte de los costos de este servicio para las manufactureras al que se suma, además, una reducción la alícuota sobre los Ingresos Brutos a la mitad. A cambio, las industrias beneficiadas se comprometen a preservar las fuentes laborales registradas.
Este acuerdo tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre de este año y podrá ser prorrogado en caso de persistir las condiciones económicas que dieron origen a esta iniciativa que también invita a los municipios de la provincia a adherir a ella y, de ese modo, reducir tasas locales para beneficiar a las fábricas radicadas en sus localidades.
Además del gobernador Casas, rubricaron el acuerdo el presidente y vicepresidente de la Unión Industrial Riojana (UNIR), Bogos Ekserciyán y Raúl Garat, representantes de las industrias radicadas en los parques de la provincia y de la Confederación General del Trabajo (CGT) entre otros.
Desde La Rioja denuncian que la apertura de las importaciones de prendas de vestir y productos semi-terminados a precios de dumping provocó un impacto negativo que derivó en el cierre de VF Jeanswear en Arauco, de una de las plantas de Puma en Sanagasta, de Confecciones Riojanas en la capital y puso en grave situación a otras plantas industriales que entraron en concurso de acreedores o en procedimientos preventivos de crisis.
El documento
El acta firmada repasa que en el último bimestre se se produjo el cierre de Confecciones Riojanas dejó 80 trabajadores en la calle, el cierre de una de las plantas de Hilados que provocó la pérdida de otros 110 puestos de trabajo a las que se sumó Ritex con 40 despedidos.
Al mismo tiempo precisa que también alcanzó a otros rubros y provocó el cierre de las plantas de Galileo y Atiles y la racionalización de Convenor y Kalpakián.
En el acuerdo se consigna que desde 2016 cerraron industrias y se perdieron 2.000 puestos de trabajo fabriles por lo cual proponen una “una malla de contención de las inversiones y de los 7.000 puestos de trabajo director que representa y sostiene la industria riojana”.
En ese sentido, el Índice de Producción Industrial Manufacturero (IPI) publicado por el INDEC pone de relieve que la industria textil, indumentaria, cuero y calzado riojanas acusan un desplome del 14.4% con una capacidad ociosa aproximada del 50 %
La Rioja posee en sus Parques el polo textil más importante de Argentina al concentrar casi un tercio de esta industria a nivel nacional que en materia de empleo se traduce en 7.000 fuentes de trabajo de las casi 10.000 registrados en el PI.
Crisis nacional
La crisis del sector textil se extiende a toda la geografía argentina tal como demuestra que desde el Ejecutivo de Chubut pidieron medidas de promoción para la producción ovina y el sector lanero cuyo procesamiento se realiza en un 90% en el parque industrial de Trelew.
Asimismo, el 1 de abril cerró sus puertas TecnoSport Latinoamericana, una de las empresas de calzado que producía para Nike y que estaba radicada en el parque industrial Villa Flandria, Luján lo cual sumó 120 nuevos despidos a las 9000 empleos que ya se cobró la crisis del sector del calzado.
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