Un Parque Industrial Tecnológico hermanado con Irán anunció el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro al regresar de la gira euroasiática.
Ordenó a su gabinete económico “diseñar, arrancar e instalar”, “de manera inmediata”, un Parque Industrial con know how tecnológico iraní para desarrollar las industrias de la alimentación, la salud y la educación.
Durante su visita a Irán -que fue la tercera de las seis escalas de la gira internacional de 11 días-, tuvo la “oportunidad” de recorrer por “varias horas” un Parque Industrial Tecnológico en las afueras de Teherán y quedó impresionado.
El Ministerio de Industria, Minería y Comercio del país asiático construyó un Parque Industrial dedicado a la confección de prendas de vestir ubicado en la provincia de Teherán.
Cuenta con una superficie de 45.000 metros cuadrados, y tiene como objetivo limitar las importaciones de prendas de vestir en el mercado iraní y elevar su producción doméstica, haciendo los precios de su ropa más competitivos en el extranjero.
Para la puesta en marcha del Parque Industrial de moda, el Ministerio coopera con productores italianos y turcos del ramo, así como con agencias de distribución que operan en el mercado iraní, según Financial Tribune.
Estos actores podrán obtener licencias de negocio en la nueva área industrial si producen bienes en Irán que representen al menos un 20% de sus importaciones en riales, la moneda local, así como exportar como mínimo el 50% de sus mercancías, un modelo que el régimen bolivariano de Venezuela sigue muy de cerca.
Maduro celebró un contrato para la compra de 1.000 camas para los enfermos renales y las diálisis “con tecnología de punta mundial”.
Y comentó que “estas son soluciones científicas para la salud. (…) medicinas de todo tipo me enseñaron en Irán, medicinas de todo tipo para prevenir enfermedades, para sanar enfermedades, de todo, impresionante”, expresó.
La idea de buscar en los Parques Industriales Tecnológicos respuestas inmediatas a estímulos para reactivar la producción le daba vueltas desde el año pasado.
El régimen venezolano encaró gestos de distensión dirigidos al polo fabril de Carabobo, donde plantas de caucho, autopartistas, ensambladoras automotrices, químicas, alimenticias y agroindustriales venían operando al 20% de su capacidad.
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En ese contexto, la vicepresidenta del chavismo, Delcy Rodríguez, había concurrido a la Asamblea de Fedecámaras del año pasado, en momentos en que la industria (los Parques), el comercio y la actividad inmobiliaria ya se encontraban en modo supervivencia y necesitaban de puentes oficiales, aunque no comulguen con la ideología ni con la forma de gobernar.
En esta oportunidad, Maduro apeló a un acto televisado para transmitirle al pueblo que el vicepresidente del Poder Popular del Petróleo, Tareck El Aissami, y la nueva vicepresidenta de Ciencia, Educación y Salud, Gabriela Jiménez, se pondrán de acuerdo para “diseñar, arrancar e instalar en Venezuela un Parque de Desarrollo Industrial Tecnológico hermanado con Irán de manera inmediata”.
Luego de sostener que Venezuela tiene un “patrimonio científico tecnológico de primer nivel”, el mandatario señaló que este Parque estará orientado al desarrollo de los “temas de la alimentación, la salud, la educación”.
Asimismo, el jefe de Estado anunció la creación de una vicepresidencia para la Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, de la que estará encargada la ministra de Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez.
“El país que en este momento se quede rezagado de la nueva época, en cuanto a conocimiento, a educación, a ciencia y tecnología, será esclavizado, más temprano que tarde, por los poderes mundiales”, indicó.
El mandatario afirmó que Irán se comprometió con su Gobierno a “trasladar” todo su conocimiento para el “desarrollo integral” de estas materias.
También señaló que Venezuela está elaborando una hoja de ruta precisa para mejorar la cooperación con Irán en varios campos, particularmente en ciencia y tecnología.
El ayatolá Ali Jamenei dio la bienvenida a un acuerdo de asociación de 20 años firmado entre Irán y Venezuela con el objetivo de reforzar la cooperación bilateral en varios campos, en especial el tecnológico, y enfatizó que los gobiernos de Irán y Venezuela deben fortalecer aún más su relación.
Tras su regreso de una gira por países euroasiáticos y de África, informó acerca del logro de “grandes acuerdos” de inversión en materia petrolera, gas, alimentos, turismo, ciencia y tecnología.
Asimismo, que en las próximas semanas llegarán empresarios de los países visitados para firmar acuerdos “específicos” de inversión.
Uno de esos contingentes habría estado compuesto por los cinco iraníes que viajaron a bordo del avión que traía a la Argentina autopartes que tenían como destinataria a la automotriz Volkswagen, entre cuyos viajeros se encontraban cinco iraníes, presuntamente instructores de la nutrida tripulación del antiguo Jumbo.
Es la misma aeronave que utilizó Maduro para la gira presidencial, que empezó el pasado 7 de junio y finalizó el día 11, tras visitar Turquía y Argelia, Irán, Kuwait, Qatar y Azerbaiyán.