El ministro de Producción bonaerense, Javier Tizado, cumplió dos años al frente de su cartera. En diálogo con Conexión Parques radio realizó un repaso de su gestión, en especial en lo referente a los agrupamientos productivos de la provincia, una materia en la que considera que se viene haciendo “un trabajo de hormiga”.
Conexión Parques: Usted cumple dos años de gestión al frente de la cartera productiva bonaerense, ¿Qué balance hace de su gestión, especialmente en materia de políticas para Parques Industriales?
Javier Tizado: El balance es muy positivo. Cuando llegamos al Ministerio y empezamos a ver la realidad de los PI, lamentablemente lo que vimos es que no estaban en condiciones, pero no sólo desde el punto de vista de la infraestructura sino del punto de vista formal con todo lo que eso implica al no permitir la aplicación de beneficios fiscales por no estar el Parque aprobado como tal. Es decir que tuvimos primero que realizar un diagnóstico a partir del cual se aprobaron seis PI, entre ellos los de General Alvarado, Miramar y San Vicente y La Bernalesa en Quilmes. Estamos por aprobar otro en Moreno. El tema no es sólo que a las presentaciones de los Parques les faltaban documentación sino que, además, el marco regulatorio que hoy tenemos es muy burocrático y hay PI que iniciaron el trámite en 2013 y aún no logran el decreto. Por eso estamos trabajando en una simplificación del procedimiento de aprobación que, estimamos, nos dará la agilidad para ir aprobando los Parques, incluso, por etapas para poder eludir uno de los principales obstáculos que veíamos: que muchos PI tienen una gran superficie y que si deben hacer toda la infraestructura estaríamos hablando de inversiones muy difíciles de asumir, especialmente cuando se trata de obras como la red eléctrica o el pavimento, que están muy atadas al valor del dólar. Entonces, consideramos que se puede ir habilitando por partes y esta opción es bien vista por los desarrolladores e industriales.
CP: Además, favorece la seguridad jurídica a la hora de que un empresario decide radicarse en un Parque.
JT: Recibimos muchos pedidos de empresas por este tema que no sólo hace a la seguridad jurídica sino a la posibilidad de financiamiento porque al no tener un inmueble propio no hay posibilidad, por ejemplo, de hipotecar y por ende se complica traer proyectos de inversión a largo plazo con financiamiento blando.
Es decir, es un círculo vicioso en el cual la imposibilidad de acceder a un título de propiedad implica, además, la imposibilidad de llevar adelante proyectos por falta de financiamiento.
Sin embargo, y esto es un trabajo de hormiga, en materia de obras de infraestructura estamos trabajando con los Parques, los municipios y las industrias a través de figuras como el fideicomiso para que, por ejemplo, los empresarios paguen eventualmente una especie de ‘expensa extraordinaria’ y que sepan que ese dinero va a las obras que requiere el PI. Así, por ejemplo, en Miramar -si bien no fue a través de un fideicomiso- se generó una relación entre la compañía eléctrica, EDEA, con varias empresas del Parque para que realicen la conexión del suministro y luego la vayan descontando mediante bonificaciones en la factura y en esa buena idea, el Ministerio funcionó como articulador.
CP: Es que la industria sin servicios no funciona, siquiera se puede radicar.
JT: Por eso digo que da lástima ver tanto PI con tan poco servicio. Se ve que en algún momento a alguien le gustó inaugurar parques industriales, pero en rigor de verdad muchos de los que yo visito siquiera tienen un alambrado perimetral. Por eso hay que tener cuidado en prometerle cosas a las empresas que luego no se puedan cumplir y es por eso que estamos siendo muy prudentes y en la medida que las leyes nos lo permiten tratamos de flexibilizar al máximo para que los Parques sean habilitados.
CP: Igualmente de los alrededor de 150 Parques bonaerenses, ¿cuántos cuentan con la habilitación?
JT: La mitad. Y los requisitos regulatorios son muy importantes para la planificación urbana e industrial de los municipios y las ciudades porque hay muchas cuestiones que tienen que ver con la habilitación de un Parque como ser las normas ambientales, de agua… Por ejemplo, hasta hace alrededor de un mes había una medida cautelar de parte de un juez de Mercedes que impedía realizar desarrollos en la zona de Escobar, Exaltación de la Cruz, Pilar por una causa relacionada con inundaciones, una cautelar que fue muy importante levantar pero que demuestra que si los PI no se llevan adelante bajo estrictas normas y procedimientos relacionados con estas cuestiones se hace muy complejo planificar y ordenar cuestiones como el tránsito.
Es por eso que promovemos los Parques, pero sabemos que es necesario hacerlo dentro de un marco, no se puede seguir trabajando sobre excepciones porque lo único que hacen es que tengamos, por ejemplo, fábricas dentro de las ciudades que terminan siendo improductivas porque lo que se tiene son camiones dentro de las ciudades que rompen las calles y hacen que los intendentes deban volver a invertir en asfaltos.
CP: ¿Qué acciones desarrolla su cartera para que las fábricas salgan de los centros urbanos y se radiquen en los Parques Industriales?
JT: Este es un tema que involucra especialmente la cuestión del financiamiento porque esa es la herramienta necesaria para hacer posible que las empresas se radiquen en los PI y para lo cual la Provincia presenta opciones a través de su banco y también tiene una línea el BICE aunque el nivel de las tasas hace muy difícil acceder a ella aunque en términos de plazos son buenos instrumentos. Igualmente, hay muchas empresas, en especial del primer cordón del conurbano, que están buscando mudarse a sitios más tranquilos, sin tanta congestión y con mejores accesos. En este punto, recientemente hemos consorciado los puertos de Dock Sud y de San Nicolás, estos son temas fundamentales para los PI de esas zonas, al igual que las autopistas y los ferrocarriles. Uno de los desafíos es tratar de lograr que los trenes lleguen hasta los puertos para bajar costo logístico.
Cuando proponemos que las industrias salgan de los centros urbanos debemos tener en cuenta los déficits en materia de infraestructura, en especial en transmisión y distribución de energía eléctrica y de gas. Un ejemplo de esta situación es el parque General Savio de Mar del Plata, donde la mitad del agrupamiento no tiene gas por lo cual estamos trabajando con la distribuidora para que cuando en julio llegue el gasoducto abastezca al Parque.
El otro tema que preocupa son los recursos humanos porque si bien hay gran demanda de empleo, saliendo del conurbano hay muchos perfiles de empleo industrial que son muy difíciles de encontrar. Sin contar la dificultad de los traslados, porque cuando uno observa las fábricas ve que la gente vive en sus cercanías.
Por eso es importante no sólo abrir Parques sino que, en conjunto con los municipios, se le brinde a la Pyme los recursos que necesita para su desarrollo.
CP: ¿En qué estado están los reclamos por la promoción industrial por parte de muchas empresas bonaerenses que se radicaron en Parques?
JT: Hay varios expedientes presentados por el tema de la promoción industrial y es un caso parecido al de los Parques: hay trámites que fueron presentados antes de nuestra gestión, en 2013 por ejemplo, y hay certificados vencidos y problemas que nuestros procesos de auditoría indican que hay que volverlos a presentar.
Los estamos agilizando y hemos pagado varios, en especial los relacionados con la Ley del Software. Pero es un trabajo de hormiga en el que hay que analizar expediente por expediente.
De todas formas, creemos que es necesario pensar una nueva ley de promoción industrial para Buenos Aires. Considero que el hecho de dar incentivos a grandes empresas en una provincia que necesita los recursos para salud y educación no es correcto. Debemos incentivar las radicaciones pero destinar los recursos a apuntalar a las pequeñas y medianas empresas que son las que pueden requerir más apoyo, y debemos valorar los niveles de desarrollo que tiene cada municipio, así como tampoco promover que las industrias se instalen dentro de las ciudades.
Nos debemos una discusión entre todos los actores de la producción para ver qué mecanismo de promoción de inversiones adoptaremos y que no afecte los recursos porque si algo caracterizó esta gestión provincial fue el hecho de ‘cuidar el mango’, cuidar cada peso porque es la plata que los bonaerenses nos confían para invertirla en lo que más necesitan y nosotros pensamos que son los servicios indispensables: salud, educación y seguridad, y apuntalar mecanismos que generen empleo genuino.