El presidente de CADIEEL (Cámara Argentina de Industrias Electrónicas, Electromecánicas y Luminotécnicas), José Tamborenea, abordó los principales desafíos y preocupaciones que enfrenta el sector pyme industrial argentino a raíz de las últimas medidas gubernamentales, en una reciente entrevista en Conexión Parques.
Cambios regulatorios y preocupaciones por la seguridad
Uno de los temas centrales fue la eliminación de la obligatoriedad del certificado de importación de bienes de uso y la transición a un sistema de control expost. Según Tamborenea, esto genera incertidumbre y riesgos.
“Pensar que venimos de una batería de sucesiones, de caídas de reglamentos técnicos, de todo lo que tiene que ver con cambios en la seguridad eléctrica, con liberaciones en una serie de cambios también que tiene que ver con todo lo que hay que cumplir. Homologaciones y certificaciones con un paso al costado de la aduana que ya no controla más. Se fue todo a lo que se llama control expost”, comentó al respecto.
Además, el dirigente enfatizó la importancia de mantener controles estrictos sobre productos que afectan la seguridad eléctrica, recordando que “son 2500 personas por año que pierden la vida por productos deficientes, mal instalados, que afecta la calidad de vida de las personas, de la seguridad”.
Importación de bienes usados
Tamborenea aclaró que el sector no se opone a la importación de bienes de capital usados, siempre y cuando cumplan con las mismas regulaciones que los productos nuevos: “No nos oponemos a que se pueda tener una máquina usada. Por ejemplo, un camión para minería, de bienes que, obviamente, no se fabrican en el país, son necesarios para aumentar la competitividad. Lo que sí bregamos es que tienen que cumplir las regulaciones como si fuera un producto nuevo”.
Advirtió sobre los riesgos de ingresar bienes sin controles adecuados, citando ejemplos de contaminación y problemas sanitarios: “Va a entrar una máquina usada por el puerto de San Julián, por dar un ejemplo, y no tiene que presentar ningún papel. Y esa máquina no sabemos si no estuvo cosechando peras, manzanas, si entró sin ser fumigada, o sin siquiera lavarse, porque sabemos que los bienes llegan así”.
Incluso mencionó casos internacionales: “Hemos tenido casos como ha pasado semanas atrás de países donde estaba permitido el tema de bienes usados y compraron vehículos, camiones, incluso equipos médicos que fueron afectados por los temas del accidente de Fukushima, en Japón”.
El rol de los organismos de certificación
El presidente de CADIEEL destacó la importancia de los organismos de certificación y control como INTA, INTI, SENASA, ANMAT y otros, señalando que cada uno tiene su especialidad y que no existe un ente único que abarque todo: “Cada uno tiene su expertiz, no es que un organismo hace todo. No hay un organismo que se dedica a temas«.
Pidió que se refuercen estos institutos en lugar de desmantelarlos: “No los rompan. Sanéenlos. Hay que invertir tiempo, y, tal vez, hacer una consultoría. Depuren si lo tienen que depurar, pero no me saques el personal técnico, no me saques las regulaciones que son correctas”.
Competitividad, costos y cadena de valor
Por otro lado, Tamborenea analizó el impacto de los costos logísticos, impositivos y de infraestructura en la competitividad de la industria nacional. Hizo énfasis en cómo la cadena de valor industrial multiplica los costos por la acumulación de impuestos y fletes.
“La logística para fabricar es cinco veces más costosa que para importar un bien. Si el impuesto del gasoil es 57%, si los neumáticos por la infraestructura de la ruta de nuestro país duran el 35, 40% de lo que duran en países como Chile, el camión me vale el doble. Porque las rutas son un desastre y se rompen todos los trenes delanteros, las cubiertas, los amortiguadores, etcétera«, explayó.
¿Cuál es la realidad del sector?
CADIEEL agrupa a 2.200 industrias del sector electrónico, electromecánico y luminotécnico. El entrevistado compartió datos sobre la actualidad del sector: “En el último informe, revelaba que el 29% de las empresas registraba un crecimiento y que había 21% de empresas que planeaban invertir. 29% crecían, pero 34% bajaron. Es una mirada dispar. No a todos los sectores le afecta lo mismo”.
Explicó que sectores ligados a la obra pública están más afectados por la parálisis, mientras que quienes proveen tecnología para el agro, minería y energía muestran mayor dinamismo.
Para concluir, Tamborenea hizo un llamado a la defensa del trabajo argentino y a la evaluación responsable de las medidas: “Defendamos el trabajo argentino, y demos tiempo para eso, porque si se pierde el trabajo se desmorona todo. Antes de tomar medida, estudiemos ese impacto que tiene, porque después es muy difícil de recuperar”.
Escuchá la entrevista completa:
Conexión Parques radio con la conducción de Lía Ghelfi