La Universidad Austral presentó una nueva investigación con indicadores sobre el discurso entre el empleo público y privado- Se trata del informe del Centro de Estudios de Comunicación Aplicada, de los autores Máximo y Augusto Reina, editado por Juan Pablo Cannata.
El informe revela que el 62% de los argentinos prefiere un empleo en el sector público, y si bien se intensifica en los estratos sociales más bajos, es una tendencia que se impone en todos los sectores sociales. El estudio indica que “la tranquilidad de no ser despedido y de que el Estado presenta los cambios y las continuidades que se observan en la opinión pública respecto a las preferencias y las visiones de los argentinos sobre el empleo público y el empleo privado.
Desde el punto de vista político en el 2017, el oficialismo sostenía una visión más cercana a lo “privado” y ahora el oficialismo sostiene una visión más cercana a lo “público”. En este contraste contextual la Universidad espera realizar un aporte para continuar la reflexión sobre el modelo de gestión y desarrollo de la Argentina.
Conclusiones
Entre las principales conclusiones, además, el informe muestra con datos y presentación de percepciones y categorías interpretativas de la sociedad argentina la consolidación de un sentido común estatista. Sólo sectores ABC1 mantienen con claridad preferencias hacia las empresas privadas como proveedoras de bienes públicos.
La sociedad argentina del siglo XXI confía en el Estado, en las empresas públicas y cree en los valores solidarios del trabajo en el sector público. Por lo tanto, trabajar en el Estado o para el Estado significa hacer algo para todos, cumpliendo una finalidad loable y sin fines de lucro (altruista o solidaria).
El fracaso económico y político del gobierno de Macri, que instaló durante unos años la pregunta sobre si los “CEO’s”, los empresarios y la lógica del management podían ser el mejor modelo para impulsar el desarrollo del país, no sólo dio lugar a un cambio de gobierno, sino que parece haber acrecentado los valores del consenso estatista.
A su vez, las restricciones de la pandemia que pusieron al Estado en el centro de todas las actividades han mostrado, una vez más, que las crisis (que parecen crónicas en el país) son más agresivas con el sector privado. El mundo público, con sus limitaciones, es un mundo de seguridad. Y esa seguridad vale mucho cuando el contexto es muy hostil o cuando la persona no se siente empoderada (por sus recursos, se educación) frente al contexto.
Respecto del discurso público sigue siendo notable la identificación de lo privado con las grandes empresas. Todo el gran universo de las pymes está invisibilizado en las percepciones del tema del empleo como “problema público” (Elizalde, 2017). Esto es muy importante si consideramos el mapa de jugadores públicos y de posicionamiento frente a los debates por la regulación laboral: por ejemplo, nos es lo mismo pensar un debate como sindicalistas vs. grandes empresas o sindicalistas vs. pymes. La asimetría de poder cambiar de signo dependiendo la definición pública del debate.
Frente a estos datos el sector empresario se encuentra ante el desafío de mostrar más lo que aporta a la sociedad y el sector estatal, ante una visibilización de las posibilidades de crecimiento y cualificación profesional en el empleo público. En estas percepciones, al sector empresario le faltan valores; y al sector estatal le falta calidad profesional
Finalmente, otro ámbito invisible en estas consideraciones es el tercer sector o la sociedad civil. Millones de puestos de trabajo se ubican en esta intersección entre lo público y lo privado que son los ong’s, fundaciones, asociaciones civiles. Todo el sector de la educación o de la salud, que son públicas, pero pueden ser de gestión privada o estatal; los clubes, las cooperativas, las parroquias o templos, los centros culturales, museos, y toda la amplia gama de entidades intermedias. Introducir complejidad en el debate, seguramente, ayudará a mejores diagnósticos y mejores propuestas.
Así, este informe sobre el empleo nos lleva a la reflexión general sobre lo público y lo privado, y la interrelación entre lo público y lo privado. Lejos de ser temas de la sociología de los años 80, son debates de fondo que atraviesan el pasado, el presente y el futuro de los argentinos y argentinas.
INFORME COMPLETO
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